Es un acontecimiento político-regional crucial, porque representa el logro de una lucha de mujeres y organizaciones de mujeres rurales de la región, y porque por primera vez incorpora en lo más alto de la agenda interamericana la construcción de un plan de trabajo que atienda la deuda histórica e impostergable con las mujeres rurales.
Busca construir y ejecutar un plan de acción efectivo para el acceso a los derechos, los servicios y a las medidas de prevención, erradicación y reparación de todas las formas de exclusión, discriminación y violencia que sufren las mujeres, adolescentes y niñas que viven en entornos rurales.
Pueden leer más al respecto aquí